A parte de los valores del pH, la información más importante, tanto si se trata de soluciones acuosas como no, es la dada por la conductividad electrolítica. Estas mediciones son muy exactas y los instrumentos muy sensibles, requieren poco mantenimiento y pueden funcionar de forma continua. Por todo esto, la conductividad es una magnitud que se emplea para análisis de control y se aplica en procesos automáticos.